La Guardia Civil y varias policías locales hallan durante la operación varias plantaciones de marihuana y pequeños alijos de droga
24.11.12 - 01:40 -
JOSÉ ALFONSO PÉREZ |/ La Verdad
La Guardia Civil y las policías locales de los municipios del Mar Menor les llevaban siguiendo la pista desde hacía varios meses, como presuntos autores materiales de decenas de robos en vehículos por toda la comarca, cometidos desde principios de año. Una vez reunidas las pruebas y recabada la autorización judicial pertinente, la Benemérita señaló la jornada de este viernes para llevar a cabo la redada en los domicilios de los sospechosos, todos residentes en La Unión.
Sin embargo, lo que en principio se había previsto como una operación relativamente sencilla, se fue complicando a lo largo de la jornada. Y es que los agentes, al entrar en las viviendas de los sospechosos, principalmente en la barriada de San Gil y en las viviendas sociales del entorno del IES María Cegarra, descubrieron en algunas de ellas plantaciones de marihuana y pequeños alijos de droga.
A su vez, según informaron fuentes de la Guardia Civil, varios detenidos involucraron a otras personas en sus declaraciones en el cuartelillo, lo que fue aumentando el número de detenciones. Por la mañana, el número de personas arrestadas era de doce. Al cierre de esta edición, ya eran veinte, y el cuartel continuaba siendo un hervidero de idas y venidas, mientras que en los exteriores permanecían, expectantes, familiares y allegados de los implicados.
Los detenidos son, en su mayor parte, de nacionalidad española. El resto son marroquíes, informaron las mismas fuentes. La mayoría pasarán a disposición judicial en las próximas horas.
Aunque la mayoría de los agentes iba de paisano, la intervención policial no pasó desapercibida para los vecinos de los aledaños de las zonas 'peinadas' y del cuartel, por donde todo el día no pararon de circular patrullas de la Benemérita y la Policía Local trasladando a los detenidos.
Los investigadores sospechan que algunos de los arrestados podrían haber participado, asimismo, en otra anterior oleada de robos de bicicletas. La sustracción más sonada ocurrió en diciembre de 2009, en los garajes de una urbanización del residencial Plaza Mayor.
Ola de robos en 2009
En aquella ocasión, los cacos sustrajeron diez bicicletas de una tacada, valoradas entre 200 y 1.000 euros cada una, para después venderlas en el mercado negro. Los ladrones accedieron a los sótanos desde los portones sin ningún impedimento y una vez allí rompieron las cerraduras de las cocheras individuales y volvieron por el mismo sitio con las bicicletas. Curiosamente, otros efectos de valor, como coches, motocicletas y accesorios, no fueron robados o deteriorados.
Sin embargo, la banda que ahora se ha desmantelado, según las fuentes consultadas, se dedicaba a romper cristales y espejos y «arramblar con cualquier cosa que encontraran dentro, e incluso patear el salpicadero o la carrocería de los coches».
No hay comentarios:
Publicar un comentario