El edil de IU plantea un encierro de la Corporación «inminente»
04.10.09 -
LOLA GUARDIOLA LA UNIÓN/ la Verdad
04.10.09 -
LOLA GUARDIOLA LA UNIÓN/ la Verdad
«Son excusas, estamos cabreados y nos sentimos estafados como en el timo de la estampita», señaló ayer el portavoz vecinal de Portmán, Ginés Guerrero, después de pulsar el ambiente en la pedanía unionense, en relación con el anuncio de la diputada socialista en el Congreso, Sara García, de que el proyecto de regeneración de la bahía -terminado hace más de un año- habrá de adaptarse a un «decreto de suelos contaminados».
Tanto Guerrero, como el concejal de IU, José Haro, y el Alcalde, Francisco Bernabé, se mostraron partidarios de iniciar movilizaciones si en el plazo de la semana entrante la Comisión de Seguimiento del proyecto «no convoca una reunión urgente y los responsables del ministerio dan la cara y explican el alcance de lo dicho por la diputada». Si no, Haro propone un encierro de la Corporación en el Ayuntamiento «con carácter inmediato». Bernabé exigió que la Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, «sea en persona la que diga qué está pasando».
Desde las filas socialistas, el portavoz municipal, Mariano Oliver, aseguró haber pedido al Delegado del Gobierno que concrete si aparece en los Presupuestos del Estado para 2010 «alguna partida para la regeneración». Sobre la modificación del proyecto, dijo que «el Gobierno tiene que hacer cumplir la normativa ambiental y si el proyecto sufre algún retraso de meses, habrá que aceptarlo».
Agravio comparativo
Este nuevo retraso, si se confirma, en la licitación de las obras, según reconocieron el alcalde y el edil de IU, contrasta con la reciente intervención de Elena Espinosa en el Senado, donde anunció que «es el momento de agilizar» las obras de descontaminación del embalse de Flix (Tarragona), cuyos vertidos históricos de la industria química suponen una amenaza medioambiental al río Ebro.
Las obras para dragar un millón de m3 de lodos contaminados están adjudicadas por 133 millones de euros (el proyecto de Portmán asciende a 120 millones y supone la extracción de varias decenas de millones de toneladas), así como los contratos de asistencia técnica a la dirección de obra, ambiental y de coordinación de seguridad por 7,7 millones. Espinosa afirmó que «es el Gobierno el que, con voluntad y decisión, decide acometer los trabajos para encontrar la mejor solución sobre cómo eliminar los sedimentos contaminados». Éste y el de Portmán son los problemas de contaminación prioritarios que se había marcado el PSOE cuando accedió al Gobierno en 2004.
Sobre la normativa de suelos contaminados, el Concejal de Urbanismo, Carlos Javier Martínez, afirmó que data de 2007, y precisamente los experimentos in situ en la bahía durante los últimos 3 años «han sido para probar un modelo de inertización de estériles mineros», dirigido por la profesora de la Universidad de Murcia María José Martínez. En cualquier caso, añadió Martínez, «ha habido tiempo para observar cualquier aspecto que emanara de esa reglamentación, y no tiene sentido que se esgrima ahora como un contratiempo».
Tanto Guerrero, como el concejal de IU, José Haro, y el Alcalde, Francisco Bernabé, se mostraron partidarios de iniciar movilizaciones si en el plazo de la semana entrante la Comisión de Seguimiento del proyecto «no convoca una reunión urgente y los responsables del ministerio dan la cara y explican el alcance de lo dicho por la diputada». Si no, Haro propone un encierro de la Corporación en el Ayuntamiento «con carácter inmediato». Bernabé exigió que la Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, «sea en persona la que diga qué está pasando».
Desde las filas socialistas, el portavoz municipal, Mariano Oliver, aseguró haber pedido al Delegado del Gobierno que concrete si aparece en los Presupuestos del Estado para 2010 «alguna partida para la regeneración». Sobre la modificación del proyecto, dijo que «el Gobierno tiene que hacer cumplir la normativa ambiental y si el proyecto sufre algún retraso de meses, habrá que aceptarlo».
Agravio comparativo
Este nuevo retraso, si se confirma, en la licitación de las obras, según reconocieron el alcalde y el edil de IU, contrasta con la reciente intervención de Elena Espinosa en el Senado, donde anunció que «es el momento de agilizar» las obras de descontaminación del embalse de Flix (Tarragona), cuyos vertidos históricos de la industria química suponen una amenaza medioambiental al río Ebro.
Las obras para dragar un millón de m3 de lodos contaminados están adjudicadas por 133 millones de euros (el proyecto de Portmán asciende a 120 millones y supone la extracción de varias decenas de millones de toneladas), así como los contratos de asistencia técnica a la dirección de obra, ambiental y de coordinación de seguridad por 7,7 millones. Espinosa afirmó que «es el Gobierno el que, con voluntad y decisión, decide acometer los trabajos para encontrar la mejor solución sobre cómo eliminar los sedimentos contaminados». Éste y el de Portmán son los problemas de contaminación prioritarios que se había marcado el PSOE cuando accedió al Gobierno en 2004.
Sobre la normativa de suelos contaminados, el Concejal de Urbanismo, Carlos Javier Martínez, afirmó que data de 2007, y precisamente los experimentos in situ en la bahía durante los últimos 3 años «han sido para probar un modelo de inertización de estériles mineros», dirigido por la profesora de la Universidad de Murcia María José Martínez. En cualquier caso, añadió Martínez, «ha habido tiempo para observar cualquier aspecto que emanara de esa reglamentación, y no tiene sentido que se esgrima ahora como un contratiempo».
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